Dentro de los placeres de la caza aparece la perdiz como una de las piezas más cotizadas por los cazadores. L as perdices se prestan a diversas preparaciones. Los guisos y estofados suelen ser una forma típica de elaboración. Al guiso se le puede añadir una cama abundante de hortalizas y algo de caldo para que no se reseque o incluso alguna salsa como la de soja. Tanto asadas o guisadas, las perdices se pueden rellenar. Los frutos secos o las frutas desecadas suelen ser los rellenos más habituales.