Receta de Pizza con salame
La pizza con salame o peperoni es una de las clásicas de Nueva York. Se trata de una base de masa esponjosa con rico sabor a levadura, una salsa liviana, aunque podría ser picante si es de tu gusto, abundante queso y unas rodajas de salame. Puedes hacerla al horno de gas, barro o parrilla, este último si deseas un resultado más ahumado. A continución, aprenderás paso a paso para hacer la mejor masa, así como un truco a la hora de cocinarla para que quede bien esponjosa. La misma receta puedes usar para hacer otras pizzas como fugazzeta, margarita, de verdura o napolitana.
En RecetasGratis te enseñamos cómo hacer pizza con salame. ¡A cocinar!
- Para la masa:
- Para la cubierta:
Lleva la harina a una mesada limpia haciendo un hueco en el centro para agregar la levadura desgranada, el aceite y el agua tibia. Recomendamos no agregar sal a la masa porque el queso y el salame es suficientemente salado, aunque si deseas agregar igualmente, deberás mezclarla con la harina antes de agregar la levadura o podrá inhibirla. Agrega casi toda el agua, pero deja unos 100 cc.
Integra los ingredientes del centro hacia afuera para formar una masa tierna. Si necesita más agua, mójate las manos o agrega poco a poco los 100 cc restantes. Esto dependerá de la capacidad de absorción de líquido de la harina que usas, así como la humedad ambiente. Llévala a un recipiente, tápala y déjala leudar por unos 40 minutos, hasta que duplique su volumen.
Pasado el tiempo, divide la masa en unos 4 bollos iguales y estíralos en una asadera previamente engrasada. Puedes presionar cerca de los bordes para hacer el clásico tronco de las pizzas. Tápalas y déjalas leudar nuevamente mientras enciendes el horno a 200-220 ºC y lo dejas alcanzar esta temperatura.
Cubre cada pizza con salsa de tomate, que puedes condimentar previamente con ají molido, pimienta y orégano a gusto. Llévalas al horno precalentado por unos 10 minutos, hasta que tenga la base hecha. Si lo deseas, puedes terminar la preparación de estas pizzas en la parrilla. Para eso, enciende el fuego y agrega sobre la pizza el queso mozzarella rallado y las fetas de salame. Tápalas con una asadera con brasa encima y caliéntalas por unos 5 minutos hasta que el queso esté derretido. Si las haces en el horno, agrega los ingredientes y caliéntala por unos 7 minutos hasta que el queso también derrita.
Sirve la pizza con salame y lista para comer.Cuéntanos si la pruebas y comparte la foto del resultado final.
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Uno de los mejores acompañamientos para la pizza es la cerveza. En Argentina, algunas pizzerías entregan porrones de cerveza rubia junto con una pizza de cancha o faina mientras esperas que entreguen tu pedido. En este caso, recomendamos una cerveza roja o IPA, intensas pero livianas para una preparación algo pesada. Sírvela bien fría y moja un vaso para llevarlo al congelador unos minutos previos a servirla y así lucir un efecto congelado.
