Si llevas una dieta libre de productos de origen animal o si tienes alergia al huevo, esta receta es para ti. Se trata de un budín de mandarina sin huevo con la estructura y la esponjosidad del budín tradicional, pero reemplazando el huevo por semillas de chía hidratadas. Las semillas aportan a este bizcocho fibra y grasas saludables, además de la estructura que otorga originalmente el huevo. En esta oportunidad, lo combinaremos con abundante jugo de mandarina para proporcionar un toque cítrico, dulce y húmedo al budín. Puedes, sin embargo, utilizar otras frutas como manzana rallada, banana pisada u otros cítricos como pomelo o naranja, según tu preferencia.
En RecetasGratis te enseñamos cómo hacer budín de mandarina sin huevo. ¡A cocinar!
Para empezar con la preparación de este budín de mandarina sin huevo, deberás hidratar las semillas de chía en 3 partes de agua. Como en esta receta usamos 2 cucharadas postre de semillas, las hidrataremos en 6 cucharadas postre de agua. Aproximadamente tomará unos 20 minutos, pero puedes hidratarlas durante una noche en un recipiente tapado.
Ralla la cáscara de la mandarina previamente cepillada y limpia. Luego, córtala por la mitad y exprímela para retirar el jugo. Ten cuidado con las semillas. Si tienes procesadora o licuadora, puedes procesar la fruta entera, retirando también las semillas. En ese caso, este budín aportará aún más fibra.
Cuando tengas el jugo de mandarina mezclado con las semillas de chía hidratadas, añade el aceite y el azúcar. Integra hasta emulsionar.
Agrega la harina con el polvo para hornear y el bicarbonato de sodio. Si prefieres, puedes usar harina leudante y, en ese caso, no será necesario añadir el polvo o bicarbonato, ya que están incorporados en ella. Recomendamos tamizar los ingredientes secos para que tu budín quede liso y sin grumos. Integra sin batir para que no quede duro.
Comprueba la humedad del budín y, si es necesario, añade un poco más de jugo de mandarina o agua. Ten en cuenta que las semillas de chía continuarán captando agua por lo que debe quedar una consistencia cremosa, un poco más espesa que la de los panqueques.
Cuando esté lista la preparación del budín de mandarina sin huevo, llévala al molde donde deseas cocinarlo. En este caso es un savarín de 16 cm de diámetro, que está previamente engrasado y enharinado, pero puedes usar un molde tipo inglés de 24 x 9 x 6 cm. Cocínalo en el horno precalentado a 180 ºC por unos 30 minutos o hasta que al pincharlo, no salgan restos de la preparación.
Reserva hasta que el budín enfríe para desmoldarlo. ¡A comer! Cuéntanos si lo pruebas y comparte la fotografía del resultado final.
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Una porción de este budín aporta unas 250 calorías. Además, cubre el 12% de la recomendación diaria de fibra. Asimismo, si cambias la harina por integral, aumentarás este porcentaje a 24%, es decir, duplicarías el aporte. La fibra es fundamental para moderar la respuesta de la glucosa después de la ingesta, así como la absorción de colesterol de la dieta y el tránsito intestinal.
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