En general, para hacer el budín de mandarina necesitamos licuadora, ya que utilizamos toda la fruta procesada como un puré para dar sabor y humedad al budín. Sin embargo, si no tienes licuadora, en esta oportunidad te enseñamos cómo hacerlo sin licuadora usando, por un lado la ralladura y, por otro, el jugo. El resultado será un budín esponjoso, húmedo y sabroso que inundará de olor a mandarina tu casa, ideal para un día de lluvia acompañando unos mates o infusión preferida.
En RecetasGratis te enseñamos cómo hacer budín de mandarina sin licuadora. ¡A cocinar!
El primer paso para hacer este budín o torta fácil de mandarina consiste en batir el huevo con la pizca de sal y el azúcar hasta que se disuelva.
Añade la ralladura de mandarina y el aceite, bate hasta emulsionar.
Para terminar con los ingredientes de este budín de mandarina húmedo, exprime la fruta y agrega su jugo, retirando previamente los hollejos y las semillas. Aproximadamente, necesitarás media taza de líquido. Si tu mandarina no tiene suficiente jugo, puedes completar con agua, leche o jugo de otra fruta como limón o naranja.
Agrega la harina tamizada. Si no tienes harina leudante, puedes reemplazarla por harina 0000 con 1 cucharada postre de polvo para hornear y media de bicarbonato de sodio. También puedes usar harina integral si deseas hacer un budín integral de mandarina con mayor contenido de fibra.
Integra con movimientos envolventes y vuelca la preparación en un molde previamente engrasado y enharinado donde deseas cocinar tu budín o torta de mandarina esponjosa. En este caso, es un savarín de 16 centímetros de diámetro.
Cocina el budín de mandarina en el horno precalentado a 160-180 ºC por unos 30 minutos o hasta que, la pincharlo, no salgan restos de la preparación.
Reserva hasta que se enfríe antes de desmoldarlo. ¡A comer! Cuéntanos si lo pruebas y comparte la fotografía del resultado final.
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Para hacer un desayuno o merienda completa, podrías acompañar este budín con una infusión, podría ser con leche, así como una fuente de proteína. Por ejemplo, puedes hacer un frosting de queso. También recomendamos agregar una fruta fresca. Por otro lado, si te gustó esta receta y quieres cocinar elaboraciones similares, puedes probar reemplazando la mandarina por naranja, limón o pomelo. En cualquiera de los casos el resultado será el mismo.