El origen del budín inglés casero se remonta al siglo XVII, como derivado del postre "bread pudding", hecho a base de restos de pan. Una versión menciona haber sido creado para que los navegantes lo pudieran llevar en sus largos viajes, siendo que tenia una cantidad suficiente de azúcar para funcionar como conservante. Es importante aclarar que con la disponibilidad de frío que tenemos hoy en día, lo más saludable sería refrigerarlo para prevenir que, con el paso de los días, genere algún tipo de hongo.
Asimismo, en Recetas Gratis te enseñamos cómo hacer budín inglés con nueces. ¡A cocinar!
Para empezar con la preparación del budín inglés húmedo con nueces, bate el huevo a temperatura ambiente por unos 5 minutos mientras agregas el azúcar en forma de lluvia.
A continuación, condimenta a gusto con la ralladura de limón y esencia de vainilla, continúa batiendo mientras agregas el aceite en forma de hilo.
Una vez emulsionado el aceite, agrega la leche, el jugo de limón y la mitad de la harina tamizada, reservando una cucharada para mezclarla con las nueces picadas o cortadas groseramente con la mano. Integra con movimientos envolventes.
Añade la harina restante y las nueces. Integra con movimentos envolventes para no sobrebatir ni bajar el aire incorporado en el primer paso. Corrobora la consistencia de tu preparación y, si es necesario, agrega más líquido. Esto puede depender del tamaño del huevo utilizado.
Vuelca la preparación del budín inglés fácil en un molde de unos 24 x 9 x 6 cm previamente engrasado y enharinado. Cocínalo en el horno precalentado a 180 ºC por 25 minutos o hasta que, al pincharlo, no salgan restos de la preparación.
Reserva hasta que tu budín se enfríe y, una vez que lo hayas retirado del horno, desmolda. Sírvelo con tu infusión preferida y disfruta de este húmedo y delicioso budín inglés con aceite. Cuéntanos en los comentarios qué te pareció.
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Si lo deseas, puedes servir este budín con un sencillo glaseado de limón apto para veganos. Para hacerlo, solo debes combinar azúcar impalpable con unas gotas del jugo de limón, que deberás agregar de a poco, hasta que se forme una pasta cremosa con la cual puedes cubrir el budín. En cuanto a las infusiones, puedes elegir mate, café o el té que más te guste. Este budín será ideal para compartir en una merienda con amigos, familia o para consumir en tus desayunos y meriendas, en reemplazo de la clásica tostada.