Un gran clásico de la gastronomía española son las clásicas croquetas, siempre han sido una manera estupenda de hacer reciclaje de ciertos ingredientes en la economía casera, sobre todo, en tiempo de nuestras abuelas hasta llegar a nuestros días, donde las croquetas se han convertido en toda una experiencia gourmet y de lo más variada. Ya no es necesario que tengamos sobras para elaborar unas deliciosas croquetas. Pero en la actualidad, son muchas las personas, ya sea por ser intolerantes al huevo o por ser vegetarianos o veganos, han suprimido este tipo de recetas clásicas. Por eso mismo, te proponemos unas croquetas sin leche y sin huevo, para aquellos que no lo consuman y en el paso a paso te indicamos la posibilidad de elaborarlas también sin ingredientes de origen animal para que no descartes recetas clásicas como esta de tu dieta habitual.
En RecetasGratis te enseñamos cómo hacer croquetas sin huevo, igual de ricas que las de tu abuela. ¡Vamos con la receta!
Para elaborar estas deliciosas croquetas sin huevo, empieza con el relleno. Para ello, corta la pechuga de pollo en trocitos muy pequeños. Haz lo mismo con los champiñones portobello, corta en trocitos muy pequeños para no encontrar tropezones grandes dentro de las croquetas.
Truco: si quieres hacer unas croquetas veganas, prescinde del pollo y añade más champiñones. Si prefieres, en vez de pollo puedes usar pescado.
Una vez tengas bien picado la pechuga y los champiñones, pon en una sartén una cucharada de aceite de oliva al fuego y cuando esté caliente sofríe los champiñones y la pechuga troceada.Reserva mientras prosigues con el relleno.
Seguidamente, trocea el puerro finamente y pon en una sartén más amplia tres cucharadas de aceite de oliva al fuego y sofríe a fuego suave el puerro.
Cuando tengas el puerro fino añade las cuatro cucharadas de harina y dale vueltas con una cuchara para que pierda el sabor a crudo.
A continuación, vierte el caldo vegetal o de pollo mientras remueves con unas varillas manuales para evitar posibles grumos hasta que la bechamel con caldo se vaya espesando.
Incorpora también un poco de sal y una pizca de nuez moscada recién rallada.
Ahora es el momento de añadir el sofrito de pollo y champiñones. Remueve y deja cocer 1 minuto más removiendo a menudo para que se integren los sabores y no se pegue.
Una vez tengas el relleno de las croquetas sin huevo, cambia el relleno a un bol, cubre con papel film y una vez frío reserva en la nevera unas 4 horas o toda una noche para que las croquetas compacten.
Ahora te enseñamos cómo empanar sin huevo. Para ello, mezcla en un bol las cuatro cucharadas de harina para rebozar y ve añadiendo entre 100 o 125 ml de agua mientras remueves con unas varillas o un tenedor hasta conseguir una textura un poco más espesa que el huevo batido.
Saca de la nevera el relleno de las croquetas, coge una pequeña porción de masa dándole forma de croqueta y pasa por el rebozado sin huevo.
Seguidamente, pasa la croqueta rebozada del falso huevo por el pan rallado. Aprieta un poco con las manos para que el pan quede bien adherido.
Una vez tengas formadas todas las croquetas, pon los 300 ml de aceite de oliva en una sartén al fuego y cuando esté bien caliente pon a freír las croquetas. No pongas muchas a la vez para que se hagan poco a poco.
Ve depositando las croquetas sin huevo una vez cocinadas en un plato con papel de cocina para que suelte el aceite sobrante.
Sirve las croquetas sin huevo enseguida para comerlas calientes. ¡Verás qué ricas quedan estas croquetas! Anímate a elaborarlas en casa y cuéntanos qué te han parecido. También puedes enviarnos una foto para ver cómo te han quedado.
Espero que te haya gustado esta receta y te animo a que visites mi blog Cakes para ti.
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