En RecetasGratis queremos proponerte, esta vez, una deliciosa receta de gallo a la plancha, una manera sencilla, sana y saludable de preparar este pescado que puede encontrarse en las aguas del Atlántico, el mar Mediterráneo y el mar Cantábrico.
El gallo es un pescado blanco parecido al lenguado. Nos aporta nutrientes como el fósforo, el magnesio, el potasio, el yodo y muchas vitaminas. Además, es un pescado muy ligero con poca grasa, ideal para las dietas de adelgazamiento o para quienes buscan alternativas para comer saludable. A continuación, te contamos cómo hacer gallo a la plancha, así que sigue leyendo y descúbrelo.
Para hacer el gallo a la plancha, pide en la pescadería te lo limpien. Como es un pescado grande, le quitarán la cabeza y las tripas de los lados y cortarán los laterales. Este pescado es para dos personas, pesa unos 600 gramos.
Pon una plancha al fuego con un poco de aceite, ponla a fuego fuerte, sala el gallo y añade un poco de pimienta.
Cuando la plancha esté bien caliente, pon el gallo a la plancha, déjalo 2-3 minutos por un lado, dependiendo de lo grande que sea, y dale la vuelta para dejarlo otros 2-3 minutos más.
Para que se haga por dentro, tápalo con una tapa para que el vapor que sube cocine el centro. De esta forma, se hará bien y quedará jugoso. No lo cocines demasiado o quedará muy seco. Ten mucho cuidado a la hora de darle la vuelta, aunque tengas buena plancha, el pescado suele pegarse. Para que no se te pegue, puedes pasarlo un poco por harina.
Cuando esté listo este gallo a la plancha fácil, sácalo y, con mucho cuidado, ponlo en una fuente. Como ves en la foto, se rompe fácilmente. Sirve enseguida para que no se enfríe. Saca los filetes del gallo con ayuda de un cuchillo y ve sirviendo. Puedes acompañar el pescado con unas rodajas de limón.
Si te ha gustado la receta de Gallo a la plancha, te sugerimos que entres en nuestra categoría de Recetas de Pescado blanco.
En la pescadería, podrás encontrar los gallos grandes o por ración. En las pescaderías preparan los grandes en filetes. Con las espinas y la cabeza puedes hacer un caldo de pescado con camarón para que no se desperdicie nada.
Los más pequeños se pueden hacer a la plancha o fritos, pero ten en cuenta que tendrán muy poca carne. En nuestro caso, preferimos el gallo grande, pues en la pescadería lo limpian y le cortan la cabeza. Tanto en filetes como entero, así como a la plancha o al horno, este pescado queda espectacular, no necesita muchos ingredientes ni cambiarle el sabor, ya que es muy suave y rico.
Puedes prepararlo para una cena junto a una ensalada o un salteado de verduras, ¡será una comida muy sana! Aquí te dejamos otras ideas de recetas con pescado para inspirarte:
- Cocochas de bacalao rebozadas
- Merluza en salsa de almendras
- Congrio al horno
- Lubina a la bilbaína
- Reineta a la mantequilla