El helado de chirimoya es una delicia que destaca por el aroma y dulzura natural de esta fruta tropical, perfecta para preparar un postre cremoso y casero sin necesidad de máquinas especiales. En esta receta aprenderás paso a paso cómo hacer un helado de chirimoya con pocos ingredientes, logrando un resultado delicioso y refrescante. ¡Ideal para disfrutar en los días calurosos o para sorprender con un postre diferente y natural!
Por todo ello, en RecetasGratis te enseñamos cómo hacer helado de chirimoya. ¡Creemos sabores!
Para preparar la pulpa del helado, abre las chirimoyas, retira cuidadosamente las semillas y extrae toda la pulpa con una cuchara.
Coloca la pulpa de chirimoya en la batidora junto con la leche condensada. Procesa hasta obtener una mezcla suave y homogénea, asegurándote de que ambos ingredientes se integren perfectamente para lograr un helado cremoso y lleno de sabor.
Procesa la mezcla hasta obtener un puré suave y sin grumos. Si prefieres una textura aún más fina, puedes colarla para eliminar cualquier resto y conseguir un helado más cremoso.
En un bol frío, bate la nata hasta que esté semimontada, es decir, con volumen y textura cremosa, pero sin llegar a estar demasiado firme.
Incorpora la pulpa de chirimoya a la nata semimontada con movimientos suaves y envolventes, para integrar bien los ingredientes sin perder la aireación y así mantener la textura cremosa del helado.
Incorpora la mezcla con movimientos suaves y envolventes para conservar el aire y mantener la textura ligera. Vierte el preparado en un recipiente apto para congelar y llévalo al congelador durante 3 a 4 horas cada 30–40 minutos, retíralo y remueve con una cuchara o batidor para romper los cristales de hielo. Repite este proceso 3 o 4 veces para obtener un helado más cremoso y delicioso.
Cuando el helado alcance la textura ideal, sácalo del congelador unos minutos antes de servir para que se ablande ligeramente. Decora con hojas frescas de menta y disfruta de este exquisito y refrescante helado de chirimoya. ¡A comer! Cuéntanos en los comentarios tu opinión y comparte con nosotros una fotografía del resultado final.
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Para lograr un helado de chirimoya delicioso y con la textura perfecta, sigue estos prácticos consejos:
- Una pizquita de sal realza el dulzor natural de la chirimoya y equilibra el sabor del helado. Puedes añadir un chorrito de jugo de limón para intensificar el sabor.
- Si quieres variar el sabor puedes incorporar coco rallado, trocitos de mango o piña muy picados para una versión más exótica.
- Si las chirimoyas no están muy dulces, agrega un poco más de azúcar o miel. El frío intensifica la acidez, así que prueba la mezcla antes de congelar.
- Si no quieres remover el helado varias veces durante el congelado, añade ½ cucharadita de goma guar o goma xantana.
- Solo necesitas una pizca para mejorar la textura.
- Guarda la mezcla del helado en la nevera 2–4 horas antes de congelar.
- El reposo potencia el aroma de la chirimoya.
Valor nutricional
(por comensal)
- Calorías: 47 kcal
- Proteínas: 7,5 g
- Grasas: 3 g
- Carbohidratos: 42,5 g
- Fibra: 1,3 g