Receta de Pan de muerto relleno de fresas con crema
El pan de muerto es símbolo, memoria y ritual, pero también puede reinventarse. Esta versión, rellena de fresas frescas y crema batida, aporta un giro contemporáneo a la tradición: celebra el Día de Muertos con un sabor moderno, sin perder el gesto de homenaje que lo define. La masa conserva su forma clásica —redonda, con “huesitos” cruzados y aroma a azahar—, pero se abre para recibir un relleno fresco, suave y festivo, perfecto para compartir en familia.
Por ello, en RecetasGratis queremos enseñarte cómo hacer pan de muerto relleno de fresas con crema. ¡A hornear!
Ingredientes:
- Para el pan:
- Para el relleno:
Cómo hacer Pan de muerto relleno de fresas con crema:
Empieza colocando en el bowl de la batidora los ingredientes secos: harina, sal, azúcar y levadura seca. Mezcla ligeramente con una espátula o batidor manual, y en el centro incorpora los ingredientes líquidos: huevos, leche y té de azahar. Enciende la batidora y comienza a mezclar hasta integrar.
Cuando los ingredientes comiencen a formar una masa, incorpora la mantequilla fría cortada en cubos, agregándola poco a poco. Luego, empieza a amasar durante unos 10 minutos, o hasta que el gluten esté bien desarrollado.
Una vez lista la masa, retírala del bowl, boléala suavemente y vuelve a colocarla en un recipiente engrasado. Cubre con un paño húmedo o papel film, y déjala reposar en el lugar más cálido de tu hogar durante aproximadamente 1 hora, o hasta que duplique su volumen.
Cumplido el tiempo de reposo, vuelca la masa sobre la mesa y desgasifica: aplástala suavemente para liberar el aire. Divídela en cuatro porciones iguales. De cada una, separa entre 2 y 3 bolitas de unos 10 g para formar las tiras decorativas, y una bolita pequeña de unos 3 g para el centro.
Bolea las cuatro piezas grandes rozándolas sobre la mesa, girándolas hacia tu cuerpo hasta que la superficie esté lisa y tensa. Pincha la base con los dedos para evitar que se abran durante el horneado.
Estira las bolitas decorativas formando tiras finas, y marca tres surcos con los dedos. Coloca las decoraciones sobre cada pan, pegándolas con huevo batido. Asegúrate de cruzar las tiras en forma de “X” y coloca la bolita en el centro, previamente presionando ligeramente.
Acomoda los panes en una placa previamente enmantecada, dejando una separación de unos cuatro dedos entre cada uno. Tápalos con un paño húmedo y déjalos leudar por 1 hora más, hasta que vuelvan a duplicar su volumen.
Una vez leudados, barnízalos con huevo batido usando una brocha y lleva al horno precalentado a 165 °C y hornea durante unos 20 minutos, o hasta que estén bien dorados. Retira del horno, deja enfriar, y luego embadurna la superficie con mantequilla a temperatura ambiente y espolvorea con azúcar granulada para dar el acabado tradicional. Deja caer el excelso y reserva.
Para el relleno, bate la crema de leche con azúcar impalpable usando un batidor de globo, hasta obtener picos firmes. Si quieres aromatizar, puedes agregar un chorrito de esencia de vainilla.
Corta las fresas en láminas finas, retirando hojas y tallo previamente.
Rebana cada pan por la mitad y rellénalo con la crema batida y las fresas. Disfruta y comparte este homenaje dulce, fresco y festivo. Cuéntanos en los comentarios tu opinión y comparte una fotografía del resultado final.
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Cómo verificar que la masa tiene el gluten bien desarrollado
Para comprobar si la masa ha alcanzado un buen desarrollo, realiza la prueba del “velo” una vez que hayas terminado de amasar. Toma una pequeña porción de masa y estírala suavemente entre los dedos, formando una lámina fina y casi translúcida. Si la masa se estira sin romperse ni rasgarse, significa que el gluten se ha desarrollado correctamente, y la estructura de la masa es lo suficientemente fuerte para atrapar los gases durante la fermentación, lo que resultará en un pan relleno de fresas con buena textura y volumen. En cambio, si la masa se desgarra con facilidad y no logra formar una película uniforme, todavía necesita más tiempo de amasado. En este caso, continúa amasando en intervalos cortos y repite la prueba hasta que la masa muestre elasticidad y resistencia adecuadas.
Este simple test permite asegurarte de que tu pan o receta de repostería tendrá la consistencia y suavidad deseada, evitando masas densas o con texturas irregulares.
Valor nutricional
(por comensal)
- Calorías: 98 kcal
- Proteínas: 14,5 g
- Grasas: 52,5 g
- Carbohidratos: 11 g
- Fibra: 2,5 g
