El pan marroquí, también conocido como batbout, es un rico pan esponjoso, tan fácil de preparar, que una vez domines la técnica, querrás hacerlo siempre, para el desayuno y las comidas.
Con esta receta paso a paso no se te escapará ningún detalle de la preparación de este rico pan casero, así que consigue todos los ingredientes y vamos directos a la cocina para disfrutar de nuestro pan marroquí esponjoso.
Empezamos por mezclar la levadura con el azúcar y agua tibia en un bol. Remover y dejar reposar unos 5-7 minutos hasta que burbujee.
Para hacer este rico pan marroquí yo he utilizado la amasadora. Entonces ponemos la sémola y la harina junto con la mantequilla, sal y la mezcla de levadura que hicimos anteriormente. Luego, con la amasadora encendida vamos añadiendo el agua poco a poco hasta obtener una masa uniforme.
Si no tenemos amasadora se puede hacer con las manos, siguiendo el mismo orden de adición de los ingredientes. Lo importante es amasar bien para que todo los ingredientes se integren.
Después de 15 minutos amasando muy bien, sacamos del bol y dejamos reposar la masa en la encimera. La tapamos con un trapo y esperamos 10 minutos.
Pasado ese tiempo cortamos en 4 trozos intentando que sean iguales y formamos bolitas con la ayuda de un poco de harina para que so nos pegue la masa en las manos. Bastará con que espolvoreas una mínima cantidad de harina sobre cada bola de masa.
A continuación aplasta cada bola con las manos para darle la forma redonda, típica del pan marroquí, a las cuatro piezas.
Las ponemos en una bandeja de horno, previamente forrada con papel de horno para que no se nos pegue, y tapamos con un trapo limpio. Dejamos reposar unos 45 minutos más.
Después de reposar habrá subido la masa, entonces encendemos el horno a 250 °C con calor arriba y abajo y dejamos que se caliente. Ponemos la bandeja de pan y dejamos que se haga el pan hasta que se dore y se vea como el de la foto.
¡Y listo! Luego podremos disfrutar de nuestro pan marroquí esponjoso. Este tipo de pan lo podemos comer a todas horas ya que nos servirá para el desayuno, la cena o para acompañar el plato principal.
Y si quieres seguir haciendo pan casero, no dejes de probar la receta de pan italiano, el pan casero sin amasar o el famoso pan de pita.
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