El pollo es un tipo de carne blanca con un bajo aporte calórico. Por ello, incluirlo en nuestra dieta es muy importante, tanto para mantener el peso ideal como para intentar eliminar esos kilos de más. Aunque la mejor forma de cocinarlo es a la plancha o hervido, en RecetasGratis.net te vamos a enseñar a elaborar una receta un poco más pesada, con mantequilla y ajo, pero muy sabrosa. Si sigues una dieta para adelgazar, deberás compensar las calorías que aporta este plato con una preparación más ligera y consumir, así, las calorías diarias estipuladas por el nutricionista. Sigue leyendo y descubre cómo hacer pechugas de pollo con ajo asado.
Antes de empezar a preparar la receta de pechugas de pollo con ajo, precalienta el horno a 350 ºF o 180 ºC. Luego, corta la cabeza de ajo por la mitad, vierte un chorrito de aceite oliva sobre la superficie de ambas mitades, envuélvelas en papel de aluminio y hornéalas durante 45 minutos.
Pasado el tiempo, retira los ajos del horno, quita la cáscara, machácalos y mézclalos con la mantequilla para continuar con la receta de pollo. Aparte, sazona la carne con sal y pimienta.
Luego, unta las pechugas de pollo con la mezcla de mantequilla y ajos asados. Pon una sartén al fuego con aceite de oliva para que se caliente. También puedes utilizar una plancha.
Truco: Reserva un poco de mantequilla de ajo para el final de la receta de pollo.
Cuando el aceite esté muy caliente, dora las pechugas de pollo por ambos lados. Después, baja el fuego a medio para que se acaben de cocinar por dentro. De esta forma, conseguiremos que la carne quede crujiente por fuera y jugosa por dentro, con ese delicioso sabor que proporcionan los ajos asados. Puedes cocinar el pollo a la plancha o hacer pollo frito, ¡como más te guste!
Una vez que las pechugas de pollo estén listas, añade sobre cada una de ellas una cucharadita de mantequilla de ajo. Esto lo hacemos para potenciar el sabor del pollo a ajos asados y obtener una carne perfecta.
Espolvorea un poco de orégano seco molido y listo. Ya puedes servir las pechugas de pollo con ajos asados bien calientes, acompañadas de una ensalada de queso de cabra, verduras salteadas o arroz blanco. ¡Buen provecho!
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