El pretzel es un tipo de pan salado muy común en Estados Unidos, Alemania (lugar donde se originó) y otras regiones del mundo que han ido adoptando la receta y modificándola a sus gustos. En esta ocasión mostraremos una preparación sencilla y deliciosa, que nos dará como resultado un pan muy similar al pan de molde. Quédate en RecetasGartis.net y aprende a preparar pretzels salados de forma fácil.
Coge un tazón mediano y añade el agua tibia y la levadura, deja reposar unos minutos. Luego, revuelve para disolver la levadura y añade una taza y media de harina, el azúcar y la sal común. Mezcla con una espátula hasta formar una masa harinosa como la que se muestra en la fotografía.
Para seguir con la preparación de los pretzels salados, amasa con una batidora a baja velocidad durante 5 minutos. Si no dispones de batidora ni robot de cocina, puedes amasar con las manos. Si la masa es muy pegajosa después de 1 minuto, agrega una cucharada más de harina a la vez que bates la mezcla. Cuando puedas formar una bola, la masa esté suave y ligeramente pegajosa, estará lista.
Limpia el tazón, úntalo con un poco de aceite y vuelve a colocar la masa dentro. Cubre con un paño limpio y deja que repose en un lugar cálido hasta que duplique su volumen. Esto puede durar alrededor de 1 hora.
Cuando la masa haya duplicado su volumen, colócala sobre una superficie ligeramente enharinada y divídela en 8 porciones iguales como las que se muestran en la imagen.
Coge una de las porciones, extiéndela con las manos y dale forma de bastón largo y delgado o churro. Lo ideal es que mida 50 centímetros de largo. Haz este mismo proceso con todas las porciones.
Cruza los extremos del bastón y forma un lazo como el que se observa en la fotografía.
Coge el extremo que queda debajo y pásalo por encima del otro, de manera que vuelvan a cruzarse. Fíjate en la imagen y realiza el mismo nudo.
Luego, dobla el nudo hacia abajo, colocándolo sobre el círculo. Así, daremos forma de pretzel a cada una delas porciones.
Coloca los pretzels sobre una bandeja de horno previamente forrada con papel de hornear. Deja cierta separación entre ellos, cubre los panecillos sin presionar y deja que reposen durante 20-30 minutos fuera del horno.
Precalienta el horno a 230ºC. Cuando observes que los pretzels empiezan a hincharse, vierte 8 tazas de agua en una olla honda y caliéntala a fuego alto. Cuando hierva, agrega el bicarbonato y el jarabe o azúcar moreno. El bicarbonato hará que la espuma del agua llegue hasta los bordes de la olla, revuelve y disuelve estos ingredientes. Reduce el fuego a medio. Luego, introduce 2 o 3 pretzels en el agua (tantos como quepan pero sin apretarse entre ellos).
Cocina a fuego lento durante 30 segundos, después, utiliza la espumadera para voltear los pretzels. Cocina durante 30 segundos más, retíralos y vuelve a colocarlos en la bandeja de horno. Verás que tras el baño los pretzels se hinchan un pocomás y adquieren una apariencia arrugada.
Cuando todos los pretzels hayan pasado por el proceso anterior, bate el huevo con 2 cucharadas de agua tibia y píntalos con esta mezcla. Espolvorea un poco de sal.
Hornea los pretzels salados durante 12-15 minutos, o hasta que adquieran un tono marrón oscuro y brillante. ¡Y listo! Colócalos sobre una rejilla para que se enfríen y reposen. Lo ideal, es comerlos fríos o templados. Puedes abrirlos y rellenarlos de jamón y queso, o espolvorear un poco de sal gruesa y comerlos así. Son ideales para comer entre horas o acompañar un aperitivo a base de canapés, ensalada templada, tapas...
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