La salsa inglesa, también conocida como salsa Worcestershire o salsa Perrins, es un potenciador del sabor para aderezar ensaladas, sandwichs mixtos, espaguetis o carnes. Asimismo, se puede encontrar fácilmente en los supermercados en una pequeña botella de cristal, pero también puedes elaborarla en casa de manera sencilla.
Por ello, si quieres saber cómo prepararla en casa, en RecetasGratis te enseñamos cómo hacer salsa inglesa de manera fácil y sencilla. ¡Vamos con la receta!
Para empezar con la receta de salsa inglesa, primero pela la cebolla y pícala finamente. Pela también el diente de ajo, trocea y machaca en un mortero.
Seguidamente, añade tanto la cebolla como el ajo machacado en una cazo, añade el vinagre blanco, la mostaza en grano, el trocito de jengibre, la pimienta negra en grano, el calvo de olor, las dos vainas de cardamomo, la melaza y la salsa de soja. Remueve y deja que se caliente a fuego suave.
Mientras la mezcla para la salsa inglesa se va calentando, vuelve a coger el mortero, trocea las dos anchoas y añade la sal, la canela y el curry, machaca hasta conseguir una pasta.
Ve añadiendo poco a poco el agua mientras remueves con la mano del mortero.
Sube un poco el fuego y añade a la mezcla para la salsa la pasta de anchoas, sal y curry disuelta en el agua. Remueve un poco para integrar y deja que la salsa vaya reduciendo durante 40 minutos.
Cuando tengas lista la salsa inglesa, deja que entibie y tritura bien con una batidora eléctrica.
Y ya tienes lista para utilizar la salsa inglesa casera. Para conservarla, guarda en un bote hermético en la nevera hasta tres semanas. ¡Cuéntanos en los comentarios qué te ha parecido receta!
Espero que te haya gustado la receta y te invito a que visites mi blog Cakes para ti.
Si te ha gustado la receta de Salsa inglesa, te sugerimos que entres en nuestra categoría de Recetas de Vinagretas.
Esta famosa salsa fue un encargo de Lord Sandys en el siglo XIX a unos famosos farmacéuticos ingleses, John Lea y Willians Perris. Fue el propio lord quién trajo una receta de uno de sus viajes a Bengala para que los farmacéuticos crearan una fórmula para la que luego sería su famosa salsa. En un primer momento la salsa no gustó nada, por lo que quedó relegada en una bodega donde la salsa fermentó. No fue hasta tiempo después cuando los farmacéuticos volvieron a probar casualmente la salsa desechada y con gran asombro vieron que había cambiado completamente de sabor.
Los famosos farmacéuticas decidieron entonces comercializarla consiguiendo mucho éxito con ella, guardando, eso sí, celosamente su fórmula original. Aunque ha habido a partir de entonces muchas marcas intentando imitar su fórmula, ninguna consigue igualar a la original. Hoy en día la salsa Lea&Perrins, se conserva hasta 18 meses en barrica para darle un sabor más genuino. La salsa inglesa, es un imprescindible para la gastronomía inglesa, así como para numerosas preparaciones, entre ellas, el famoso Bloody Mary.