Tarta de ricota y dulce de leche, una tarta originaria de Italia y también de Argentina, de manera que se puede decir que esta tarta es una fusión entre los dos países. Es una tarta deliciosa, ya que el queso ricota es muy suave y aporta una textura increíble. Además, se prepara con poca cantidad de azúcar porque el dulzor lo da el dulce de leche. El rellenos es muy cremoso y contrasta a la perfección con la base crujiente, similar a la masa quebrada. Incluso, si quieres, puedes doblar la cantidad de ingredientes y cubrir al final la tarta para hacerla tipo kuchen.
Por otro lado, puedes aromatizar tu tarta con esencia de vainilla, zumo de limón o ambas cosas, ya que el queso ricota es tan suave que se presta a incluir este tipo de ingredientes. Sigue leyendo y descubre en RecetasGratis cómo hacer tarta de ricota y dulce de leche, una receta fácil y perfecta para sorprender.
- Para el relleno:
Empieza preparando la masa para la base. Así, en un bol mezcla el azúcar con la harina, la mantequilla a temperatura ambiente, la esencia de vainilla y un huevo. Con ayuda de una espátula o con tus propias manos, mezcla hasta que quede como una arenilla, entonces añade la leche e intégrala sin amasar mucho.
Truco: puedes sustituir esta masa por una base sencilla de galletas dulces tipo María y mantequilla fundida.
Forma una bola, envuélvela en papel film y resérvala en la nevera unos 30 minutos.
Pasado el tiempo, coloca la bola sobre papel de horno y, encima, la misma lámina de papel film que has usado par envolverla y estírala con un rodillo.
Retira el papel film, forra el molde con la masa, incluidas las paredes, y déjala en la nevera mientras preparas el relleno de la tarta de ricota y dulce de leche. Precalienta el horno a 150 ºC.
En otro bol pon el queso, la vainilla, el huevo, la ralladura de limón y la mantequilla. Mezcla todo bien hasta que quede una masa lisa.
Saca el molde con la masa, cubre el fondo con dulce de leche a tu gusto, aunque te recomendamos añadir una capa generosa para notar bien su sabor. Aprovecha y prepara dulce de leche casero.
Encima del dulce de leche distribuye toda la crema de queso batida y hornea la tarta de ricota y dulce de leche durante unos 50 minutos a 150 ºC o hasta que esté hecha. Pincha con un palillo la crema, si sale seco retira la tarta. Si no está lista, pero notas que se está dorando mucho, cúbrela con papel de aluminio por encima y déjala unos minutos más.
Truco: puedes hacer más masa y decorar la superficie con tiras formando una red.
Saca la tarta del horno, deja que se enfríe y resérvala en la nevera un mínimo de 3-4 horas, o mejor de un día para otro.
Al momento de servir la tarta de ricota y dulce de leche, te recomendamos espolvorear azúcar glas o coco rallado. Queda deliciosa, cremosa por fuera y crujiente por fuera.
Otra opción totalmente válida es preparar un sencillo merengue y decorar la tarta con ayuda de una manga pastelera. En este vídeo te enseñamos a hacer merengue, no te lo pierdas.
Si te ha gustado la receta de Tarta de ricota y dulce de leche, te sugerimos que entres en nuestra categoría de Recetas de Tartas.
Dado que la torta de ricota y dulce de leche queda muy suave de sabor, puedes decorarla perfectamente con alguna crema más intensa, como las siguientes:
- Ganache de chocolate
- Crema batida de coco
- Frosting de fresa