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Cómo conservar y congelar calabacín

Eleonor Fischer
Por Eleonor Fischer, Fotógrafa gastronómica. 2 enero 2020
Cómo conservar y congelar calabacín

El calabacín siempre está presente en nuestra cocina, gracias a su versatilidad y a sus tantas formas de prepararlo. Este vegetal sirve tanto para espesar una sopa como para presentarlo como plato principal, como es el caso de los calabacines rellenos y la crema de calabacín.

Por esta razón, es probable que alguna vez te hayas preguntado si el calabacín se puede congelar para usarlo otro día. En RecetasGratis te contamos todo al respecto para que descubras cómo conservar y congelar el calabacín correctamente, ya sea crudo o en recetas. ¡Vamos a ello!

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Cómo conservar el calabacín

Existen varias formas eficientes de conservar el calabacín. Puedes hacerlo en conservas, a través de vinagretas y encurtidos, o congelarlos. Sin embargo, si piensas preparar el calabacín muy pronto, puedes simplemente refrigerarlo. Para que te dure el mayor tiempo posible en la nevera, sigue atentamente estos pasos:

  1. Déjalo entero. Si cortas el calabacín se daña más rápido.
  2. No lo laves. Evita lavar el calabacín, ya que el exceso de agua lo pudre más rápidamente.
  3. Sécalo muy bien hasta eliminar cualquier rastro humedad. Seca cuidadosamente el calabacín, hazlo con suavidad. El exceso de humedad acelera la aparición de moho.
  4. Mételo dentro de una bolsa plástica o de papel. Si tienes un calabacín dentro de una bolsa, su proceso de descomposición será más lento. Como necesitas que en la bolsa circule el aire, hazle unos huequitos antes de sellarla. Si no, puedes dejarla abierta.
  5. Dispón las bolsas con calabacines dentro del cajón de la nevera. Coloca los calabacines en esta área para combatir la humedad. Por supuesto, el área debe estar completamente limpia.
  6. No almacenes el calabacín junto a frutas que producen etileno. Si guardas el calabacín cerca de bananos, melones, melocotones y otros, adquirirá un sabor amargo.
  7. No guardes los calabacines por más de 5 a 7 días. Tarde o temprano, los calabacines comenzarán a marchitarse, así que no esperes tanto para darles uso. Mientras más fresco, mejor.

Si tienes otras dudas acerca de la conservación de las verduras y otros alimentos, no te pierdas nuestro artículo Cómo conservar y congelar brócoli y ¿Se puede congelar el queso?

Cómo conservar y congelar calabacín - Cómo conservar el calabacín

Cómo congelar calabacín sin escaldar

Aunque la mejor forma de congelar calabacines o casi cualquier vegetal es escaldándolo, también puedes congelarlos sin someterlos a ningún proceso previo (es decir, crudos) y obtener resultados aceptables. Sin embargo, debes tomar en cuenta que, apenas descongeles el vegetal, el proceso de deterioro se acelerará rápidamente, algo que sucedería de forma más lenta si lo cocinaras previamente.

Si te decides por congelar el calabacín crudo, debes preparar el calabacín de inmediato y consumirlo, preferiblemente. Para lograrlo, solo sigue estos pasos:

  1. Lava muy bien los calabacines y luego sécalos cuidadosamente.
  2. Trocea los calabacines.
  3. Guárdalos en una bolsa plástica que sea especial para congelar. Colócalos con cierto espacio entre ellos para que no se peguen al congelarse.
  4. La temperatura adecuada para mantenerlos en buen estado es -18º C, dentro del congelador casero. Así, los calabacines se mantendrán perfectos por hasta 2 meses.
  5. Una vez que descongeles los calabacines, debes cocinarlos a la brevedad posible, pues inmediatamente se activarán las enzimas del proceso de descomposición. Perderán color, sabor y propiedades nutricionales, así que tampoco debes congelarlo de nuevo.

¿Se puede cocinar el calabacín cocinado?

Sí se puede, pero esto dependerá de la cantidad de veces que cocines el calabacín. Por ejemplo, la mayoría de los productos vegetales que han sido congelados comercialmente se someten a un proceso de escaldado previo. Es decir, casi todos están cocinados previamente, para luego cocinarlos de nuevo en nuestras recetas preferidas. Como el escaldado es un proceso que dura pocos minutos, este resta muy pocos nutrientes al vegetal y, en consecuencia, resulta muy efectivo.

En el caso de la crema de calabacín, como simplemente calentamos comida congelada, la pérdida de cualidades organolépticas será aceptable. En cambio, si cocinamos los calabacines, los congelamos, los descongelamos, los cocinamos otra vez y luego pretendemos congelarnos de nuevo, no obtendremos ningún beneficio alimenticio del calabacín y, además, habrá perdido todas sus características organolépticas (olor, sabor, color, textura, etc.).

Cómo congelar crema de calabacín

En tiempos en los que todos andamos apurados, tratamos de buscar formas rápidas y eficientes de realizar las cosas. Por esta razón, cocinar un platillo y congelarlo parece una idea interesante, pues nos ahorra algunas horas diarias de trabajo culinario. En este caso, las cremas o purés de verduras se perfilan como perfectas propuestas para economizar tiempo y proporcionarnos una comida saludable y sabrosa.

Sin embargo, ya que la crema de verduras usualmente contiene varios ingredientes triturados, debes considerar cómo reacciona cada uno por separado al congelarse. Dicho esto,solo tienes que seguir los siguientes pasos para congelar crema de calabacín:

  1. Elige una buena receta. La receta correcta puede determinar el éxito o el fracaso del proceso de congelación. Es importante considerar que ingredientes como la leche y la patata no resultan muy compatibles con la congelación.
  2. Selecciona ingredientes de buena calidad. Es muy importante elegir productos frescos y de calidad. De esta forma, las cualidades organolépticas de los ingredientes estarán en su estado más óptimo.
  3. Cumple los tiempos de cocción. Vigila no excederte en el tiempo de cocción, ya que resta nutrientes a la preparación y cualidades sensoriales.
  4. No te excedas con la sal. Durante el proceso de congelación, la sal se concentra mucho.
  5. Tritura muy bien la crema de calabacín. La textura debe ser homogénea y lo más fina posible.
  6. Deja que la crema se enfríe por completo. Antes de envasar la preparación, esta debe estar fría.
  7. Guarda la crema en envases plásticos herméticos. Los envases o bolsas deben estar diseñados para congelar.
  8. Distribuye la preparación en raciones de 250 ml por persona o la cantidad que consideres más apropiada para ti. Así, resulta mucho más fácil administrar la comida y evitas descongelar lo que no consumirás al momento.
  9. Evita llenar los recipientes hasta el borde. Recuerda que, al congelarse, el contenido puede expandirse.
  10. Cierra herméticamente los envases. Es muy importante asegurarte de esto, si no lo haces, la crema perderá sus características sensoriales y sus nutrientes.
  11. Identifica el contenido y coloca la fecha de envasado. Es muy importante identificar los envases tanto con nombre como con fecha, así podrás tener un control del tiempo real de caducidad de tus alimentos y tener un inventario.
  12. Evita abrir el congelador durante las horas siguientes. Así evitas cambios de temperatura mientras se realiza en proceso de congelación.
Cómo conservar y congelar calabacín - Cómo congelar crema de calabacín

Cómo congelar calabacín fresco

La forma más popular de congelar calabacín es escaldándolo primero, como se hace con la mayoría de las verduras. Este método consiste en calentar el producto a una temperatura que oscila entre los 70 ºC y 100 ºC durante 30 segundos o más.

Este procedimiento se hace con la finalidad de inactivar o eliminar enzimas que causan el envejecimiento del vegetal, frenando así el deterioro de sus cualidades organolépticas y la pérdida parcial o total de sus aportes nutricionales. Si quieres saber cómo congelar calabacín fresco y mantener todos sus nutrientes, estos son los pasos que debes seguir:

  1. Escoge calabacines en su punto. Al comprar calabacines, debes seguir ciertos criterios de calidad: que sean firmes al tacto, compactos, pequeños o medianos, sin manchas en la piel y pesados en relación con su tamaño. En este caso, la intensidad del color no nos sirve de referencia, ya que el color se relaciona con la variedad y no con la maduración del calabacín.
  2. Lávalos escrupulosamente, utilizando agua fría. Preferiblemente, frótalos con tus manos o un cepillo especial para esta labor.
  3. Seca los calabacines cuidadosamente. Hazlo con delicadeza para no magullarlos.
  4. Corta el calabacín ya limpio y seco. Hazlo al gusto, pero elimina los extremos y decide si lo cortarás en rodajas, cubos, bastones o rallado. El tiempo de escaldado y la forma de empaquetarlos depende de cómo cortes los calabacines. Piensa en los usos culinarios que le darás a la verdura antes de elegir como cortarla.
  5. Escaldado en cubos o rodajas: Vierte agua en una cazuela hasta ocupar 2/3 de su espacio. Enciende la hornilla a fuego alto. Cuando el agua hierva, coloca las rodajas o cubos de calabacín sin tapar la cazuela. Espera 3-4 minutos y retíralo.
  6. Escaldado rallado: en este caso, el procedimiento es al vapor. Para cocinar el calabacín rallado, utiliza una vaporera encima de una cazuela llena de agua hirviendo. Coloca el calabacín en la vaporera, tápala y espera entre 2-3 minutos.
  7. No agregues sal al agua del escaldado. Si lo haces, los calabacines se descompondrán más rápidamente.
  8. Prepara una cazuela o bol con agua fría. Apenas saques el calabacín del escaldado, sumérgelo en agua fría para frenar la cocción. Si lo preparaste al vapor, emplea mejor el método del baño María invertido. Espera un par de minutos.
  9. Seca los calabacines muy bien. Utiliza papel de cocina y sécalos cuidadosamente.
  10. Guarda el calabacín rallado. Puedes meterlo dentro de una bolsa para congelar, cuidando siempre que no quede aire dentro al cerrarlo. Utiliza bolsas plásticas especiales para congelar.
  11. Guarda el calabacín en rodajas o cubos. Coloca las piezas de calabacín separadas unas de otras. Espera unas horas hasta que se congelen las piezas. Pasado el tiempo, puedes transferir los trozos a otra bolsa especial de congelación o recipiente hermético para congelarlos de nuevo, separados entre sí.
Cómo conservar y congelar calabacín - Cómo congelar calabacín fresco

Cómo descongelar calabacín

Ya congelaste el calabacín y fue un éxito, pero ahora necesitas descongelarlo. Tenlo listo para prepararlo en tus recetas favoritas con estos 3 métodos fáciles para descongelar calabacín:

  • Refrigerado: pasa el envase del congelador al refrigerador. Deja el recipiente allí hasta que se descongele o, mejor aún, hasta que los calabacines se descongelen un poco (lo suficiente como para moverlos). En este momento, cámbialos a otro recipiente que posea una rejilla o improvisa una. Así, el agua derretida quedará separada de los calabacines. Este proceso puede tardar hasta 24 horas.
  • Cocinado: este método de descongelación es el más recomendado para las verduras y otros alimentos. Solo tendrás que cocinarlo en agua hirviendo con sal.
  • Utilizando agua fría: si quieres descongelar un alimento aplicando este método, debes verificar si el recipiente o empaque esta herméticamente cerrado. Esta medida se toma para evitar el contacto directo entre el agua y el alimento durante el proceso de descongelación. Sumerge los calabacines en agua fría cambia el agua cada 10 o 20 minutos, así aceleras la descongelación.

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LENIN
Quisiera saber sobre otros vegetales? muy útil!
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