Receta de Cabezada de cerdo al horno
La cabezada de cerdo a la sal es una receta muy resultona y que no supone dificultad alguna. En menos de cinco minutos estará lista para ponerla en el horno y él solo hará el resto. En RecetasGratis aprendemos una manera deliciosa de preparar el cabecero de cerdo asado que se puede tomar tanto en frío como en caliente, que se puede preparar con antelación, que queda muy vistoso en reuniones familiares o de amigos y es ideal también para preparar bocadillos o sándwiches, ¡una receta comodín en toda regla! Además, la cabezada de cerdo al horno es tan sencilla que podrás hacerla aunque sólo pises la cocina para visitar el frigorífico, ¡no te la pierdas! Y no te pierdas tampoco las recetas que comparto en mi blog Los dulces secretos de Cuca.
Ingredientes para hacer Cabezada de cerdo al horno:
Cómo hacer Cabezada de cerdo al horno:
Comenzamos revisando la cabezada y eliminamos alguna parte de grasa excesiva que tenga por la base. Lo normal es que no sea necesario retirarle nada ya que esta pieza de cerdo suele venir muy bien limpia tanto si la compramos en la carnicería como si la compramos en el supermercado. Si tiene restos de sangre los limpiamos.
Truco: Es posible que tengas que encargarle a tu carnicero la cabezada de cerdo porque no siempre tienen piezas enteras a la venta.
En una fuente profunda y apta para el horno ponemos una capa fina (de aproximadamente un centímetro) de sal gruesa que cubra bien toda la base. Colocamos encima la cabezada y cubrimos con sal. Es imprescindible que la pieza de carne quede bien cubierta. Y también es imprescindible que sea sal gruesa, ¡no vale la sal fina de mesa o la cabezada será incomible!
Truco: Lo más probable es que no necesitemos los tres kilos de sal gruesa, pero lo mejor es tener de sobra.
Introducimos la cabezada de cerdo al horno precalentado a 200 ºC y horneamos durante aproximadamente dos horas. Cuando esté lista, la superficie de sal se resquebrajará y acabará rompiéndose. Entonces apagamos el horno, sacamos la fuente y dejamos templar el cabecero de cerdo asado para evitar quemaduras innecesarias.
Truco: Yo calculo aproximadamente una hora por kilo de carne, es un truco que funciona muy bien.
Cuando esté fría la cabeza de lomo al horno o al menos templada, con ayuda de un cuchillo terminamos de romper la capa de sal, sacamos la carne y limpiamos los restos de sal que tenga pegados con un papel de cocina. La ponemos en un tupper que cierre bien y la guardamos en el frigorífico hasta consumir. Si nos sobra se puede congelar.
Si te ha gustado la receta de Cabezada de cerdo al horno, te sugerimos que entres en nuestra categoría de Recetas de Cerdo.