Receta de Queque de limón
Un postre de limón es una de esas delicias que no puede faltar en tu catálogo de preparaciones caseras y originales. Estos postres gustan a casi todo el mundo, pues el limón es una excelente fruta para combinar con otros ingredientes dulces. Por eso, en RecetasGratis, te traemos esta receta de queque de limón, un clásico que no debes dejar pasar si te gusta el mundo de la repostería.
Es muy sencillo de preparar y nunca te fallará. Además, si ya sueles hacer otras recetas de queque, esta será perfecta para variar un poquito el postre y disfrutar de una dulce experiencia nueva. Vamos a usar pocos ingredientes y, si eres intolerante o prefieres no añadir algunos, más adelante te daremos otras alternativas para que puedas preparar uno que sea exactamente hecho a tu medida. ¡Sigue leyendo y descubre cómo hacer queque de limón!
Ingredientes para hacer Queque de limón:
Cómo hacer Queque de limón:
Comienza a preparar tu queque de limón precalentando el horno a 180 ºC con calor arriba y abajo. En un bol, integra la harina, el bicarbonato y el polvo de hornear. Reserva.
En otro bol amplio, comienza a mezclar los huevos con el azúcar hasta que la mezcla quede cremosa y los huevos crezcan el doble del tamaño.
En esta misma mezcla, agrega la mantequilla y la leche. Continúa con la ralladura y el jugo de limón. Integra los ingredientes.
Cierne la mezcla de los ingredientes secos (la harina, el bicarbonato y el polvo de hornear) y añádelos a la mezcla. Mezcla con el batidor en una velocidad más lenta hasta que los ingredientes se integren.
Vierte la masa del bizcocho de limón en un molde previamente enharinado y enmantequillado. Hornea por unos 40-45 minutos, hasta que esté dorado. Verifica que está listo con un palito o cuchillo y ¡listo! Disfruta de un delicioso bizcocho en compañía de un té helado.
Si te ha gustado la receta de Queque de limón, te sugerimos que entres en nuestra categoría de Recetas de Bizcochos.
Cómo preparar queque de limón - Consejos y variaciones
El queque de limón es una preparación excelente para las tardes calurosas, cuando nada se nos antoja más que un bocado de algo dulce y delicioso que nos haga recuperar las energías y subir el ánimo. Por eso, es súper importante que el queque esté hecho exactamente como te gusta. Vamos a ver algunas variaciones de la receta, así como algunos consejos para que te quede un queque esponjoso.
Queque de limón y yogur
Una de las formas más comunes de preparar este queque canario (es muy popular en las islas Canarias) es hacerlo con yogur de limón, en vez de jugo de limón. Solo tienes que reemplazar el jugo por un yogur y tendrás una preparación clásica y deliciosa. En este caso, puedes, asimismo, prescindir de la leche.
Queque de limón con aceite
Si quieres preparar un queque sin mantequilla, puedes sustituirla por ½ taza de aceite vegetal. Sigue los mismos pasos de la receta original y obtén un queque casero fácil al que podrás acudir cuando tengas antojo de un dulce con un toque ácido.
Queque con glaseado de limón
Hay muchas formas en las que puedes decorar tu queque para darle un toque aún más personal. Puedes bañarlo en chocolate, espolvorear azúcar glass sobre él o hacer un riquísimo glaseado de limón para acompañar sus sabores. Para prepararlo, solo necesitarás:
- 200 gr de azúcar glass
- Zumo de 2 limones
Mezcla el azúcar glass con el zumo de limón, añadiendo este último lentamente y sin dejar de mezclar. La idea es que obtengas una mezcla espesa que puedas vertir sobre el queque una vez esté frío. Si quieres variar la textura y hacerla más ligera, puedes añadir menos azúcar.
Otros ingredientes que puedes agregar para personalizar tu queque de limón incluyen las nueces, las almendras, las frutas como los arándanos o el coco rallado y más.
Queque de limón esponjoso
La clave de cualquier queque esponjoso casero es la mezcla de los ingredientes, sobre todo la de los huevos. Si los huevos no crecen lo suficiente, difícilmente tu queque quedará con esa consistencia suave que nos encanta. Además, es importante que los ingredientes secos se ciernan para que no queden con grumos que puedan dañar la textura del queque. Al añadir los ingredientes secos para formar la masa del queque, debe hacerse con movimientos más suaves, lentos y envolventes. Así, prevendremos que los huevos pierdan su tamaño.