Receta de Galletas de leche
Si no sabes cómo hacer galletas de leche fácil y rápidamente no te pierdas este paso a paso que te mostramos en RecetasGratis para que, en tan solo unos minutos, logres elaborar esta receta de galletas de leche caseras tan sencilla y práctica con pocos ingredientes. Además, usaremos maicena, por lo que son unas estupendas galletas sin gluten. Por supuesto, puedes sustituirla por harina de trigo si lo prefieres.
Estas galletas son ideales para una merienda o el desayuno, acompañadas con un vaso de leche o un café. Tienen un sabor muy suave y una textura diferente a las galletas de mantequilla tradicionales debido al harina de maíz. Se hacen muy rápido, puesto que en 10 minutos tenemos la masa y en otros 10 minutos las tenemos cocidas. No se deben cocer mucho si queremos que queden suaves y tiernas, si se hacen más de la cuenta se quedarán muy duras y secas. Revisa las instrucciones que ponemos a tus disposición y consigue de una manera muy fácil preparar esta receta de galletas con leche. ¡Verás como encantan a los más pequeños de la casa!
Ingredientes para hacer Galletas de leche:
- Si no tienes leche condensada:
Cómo hacer Galletas de leche:
Antes de empezar a preparar las galletas de leche, precalienta el horno a 160 ºC, con calor arriba y abajo. Luego, mezcla en un bol la leche condensada con la mantequilla y la yema de huevo. Es muy importante que la mantequilla esté a temperatura ambiente, de manera que si no lo está, caliéntala unos segundos en el microondas.
Truco: también puedes hacer las galletas de leche con leche normal en lugar de condensada, la proporción recomendada es de 200 ml de leche y 100 g de azúcar.
Tamiza la harina de maíz y añádela al bol poco a poco para ir integrándola sin crear grumos. Si no tienes maicena, puedes usar harina de trigo común y sumar una cucharadita de impulsor tipo levadura Royal (polvos de hornear) a la receta de galletas de leche.
Integra la harina con una espátula haciendo movimientos envolventes, así se mezclará mejor y no se formarán grumos. Si has decidido sustituir la leche condensada por leche normal y azúcar y notas que la masa queda un poco seca, vierte un poco más de leche y mezcla. Dependiendo de la harina es posible que debas ajustar un poco estas cantidades.
Debe quedar una masa muy blandita, que incluso cuesta un poco de manejar. Déjala en el bol o envuélvela con papel film y resérvala en la nevera durante 15 minutos.
Prepara una bandeja de horno con papel vegetal. Saca la masa de la nevera, quita el film transparente, forma bolitas de masa no muy grandes y ve poniéndolas en la bandeja un poco separadas unas de otras. Si se pegan en las manos a la hora de hacer las bolas ponte un poco de harina de maíz para manejarlas mejor. Puedes hacer galletitas de leche formando bolas más pequeñas, ya que el tamaño dependerá totalmente de tus gustos. Lo que sí recomendamos es que todas sean iguales.
Truco: a nosotros nos han salido unas 10 galletas.
Con ayuda de un tenedor, aplánalas a la vez que dibujas líneas. Las galletas con leche se caracterizan, precisamente, por presentar este dibujo, ¡y ya ves lo fácil que es hacerlo!
Hornea las galletas de leche durantye 10-12 minutos, vigilando que no cojan color, a no ser que quieras que queden más crujientes. Estas galletas suelen ser blanquitas, pero sobre gustos no hay nada escrito. Sácalas cuando estén listas y déjalas sobre una rejilla para que se enfríen.
¡Y listas para comer! Ya puedes disfrutar de esta receta de galletas de leche con un vaso de leche, un vasito de café, un chocolate a la taza o un tazón de golden milk o leche dorada, por ejemplo. Cuéntanos cómo has hecho tus galletitas de leche, ¡usando leche condensada o leche normal?
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Cómo conservar las galletas de leche
Ya has visto cómo hacer galletas de leche y ahora vamos a enseñarte a conservarlas durante más tiempo para que disfrutes de ellas en perfectas condiciones. Pues bien, estas galletas con leche se conservan muy bien en un bote de cristal con cierre hermético o una lata para galletas. Deberás dejarlas en un lugar libre de humedades y sin corrientes de aire.