Receta de Mole chichilo

Para preparar el chichilo negro, tuesta los chiles directo al fuego. Posteriormente límpialos, retirando venas y semillas. Reserva las semillas, pues estas se van a ocupar para el mole. Los rabos y venas se pueden desechar.

Tuesta las semillas de los chiles en una sartén caliente a fuego medio, moviendo constantemente, al menos de 5 a 10 minutos.

Remoja los chiles en agua caliente por 1 hora.Cambia el agua cada 15 minutos y repite esta operación 4 veces. Haz lo mismo con las semillas.

Truco: este paso es muy importante para hidratar los chiles, y al mismo tiempo, evitar que el mole se amargue.

Asa los vegetales del mole directo al fuego y haz lo mismo con las tortillas. Aparte, tuesta en un sartén el clavo, la pimienta y el comino.

Truco: este paso también es muy importante pues el tatemado le brinda ese pronunciado sabor ahumado que caracteriza al chilchilo negro.

Licúa las tortillas, chiles, especias, semillas y vegetales. Agrega un poco de caldo de res si es necesario para facilitar el proceso. Cuela todo cuando esté perfectamente molido.

Calienta manteca y fríe la pasta que se acaba de procesar. Una vez que esté bien frita, agrega poco a poco el caldo de res restante, hasta lograr una consistencia de mole.

Rectifica sazón con sal al gusto y añade las hojas de aguacate justo antes de servir el chichilo negro.

Truco: si sientes que el mole quedó muy suelto, puedes espesarlo con un par de cucharadas de harina de maíz o de trigo, previamente disueltas en consomé caliente.

Para acompañar el mole: corta los ejotes, calabacita y chayote en trozos medianos. Cuece los vegetales en un poco de caldo, sazona con sal y pimienta al gusto y reserva hasta el momento de servir.

Para los chochoyotes: pela el ajo y machácalo. Incorpora el ajo a la masa de maíz junto con el chicharrón prensado, la sal y la manteca. Mezcla todo muy bien.

Truco: si la masa está muy seca puedes agregar un par de cucharadas de agua para que sea más fácil manipularla.

Forma un cilindro y divide la masa en porciones iguales. Con cada porción haz una bolita y sosteniéndola en la mano, hunde en el centro el dedo meñique sin atravesarla por completo para que quede en forma de cazuelita. Repite este paso con todas las porciones hasta terminar la masa.

Calienta suficiente agua y cuando hierva a borbotones, añade uno por uno los chochoyotes. Procura que no se encimen para que no se peguen ni se aplasten. Al primer hervor, baja el fuego y deja que se cuezan durante 7 minutos. Retira del fuego y mantenlos calientes en su caldo hasta el momento de servir.

Por último, en una sartén o plancha caliente, asa los medallones de res con un poco de manteca o aceite vegetal, sal y pimienta al gusto.

Sirve el chichilo negro con la carne recién parrillada, decorado con un jardín de vegetales frescos y los chochoyotes calientitos. Este sofisticado mole de Oaxaca es ideal para servir en fiestas y celebraciones importantes, así como en las ofrendas del Día de Día de Muertos para recordar a nuestros fieles difuntos y seres más queridos. Esperamos que disfrutes de esta receta tradicional mexicana. Recuerda que puedes escribir tus dudas en la sección de comentarios así como compartir una foto con nosotros de tu resultado final.

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Con qué acompañar el chichilo negro

Además de las guarniciones que te presentamos en esta receta, en Oaxaca es muy común que se sirva este platillo acompañado por arroz blanco suelto y, por supuesto, el mezcal no puede faltar. Entre más ahumado, mejor, pues las notas aromáticas redondean perfecto con el sabor tatemado de los chiles y los vegetales asados.